Historia

De una pequeña y tradicional sastrería iniciada por el padre en Potosí hace casi 30 años, hoy la empresa genera empleo para más de 200 trabajadores entre sus cinco módulos en Cochabamba y dos en Oruro.

  • Sentado frente a su máquina de coser en un pequeño establecimiento ubicado en una de las angostas y frías calles de Potosí, don Anselmo Magne Cáceres da los últimos toques a un traje que debe entregar a uno de sus clientes. En su sastrería, instalada en su propia casa, don Anselmo trabajaba solo, aveces con la ayuda de su hijo mayor, mientras su esposa, doña Savina, se encargaba de la comercialización de las prendas que se confeccionaban en dicho taller.

    En aquellos lejanos días, el sastre que había ido con su familia de Oruro a Potosí a probar suerte, ni imaginaba que 30 años más tarde sus hijos estarían a la cabeza de una gran industria de la confección, con centro en Cochabamba, produciendo prendas que incluso se venden fuera de nuestras fronteras.

    Esa es una pequeña parte de la trayectoria de TRAILER, una empresa familiar que comenzó de la sastrería del padre para tres décadas más tarde contar con más de 200 trabajadores.

    La empresa está dividida en siete módulos productivos que se manejan de manera autónoma por cada uno de los hijos de Don Anselmo y Doña Savina, con el incansable apoyo de sus cónyuges.

“Somos de una familia de confeccionistas», nuestros padres en Potosí tenían un pequeño taller de confecciones con máquinas domésticas, hacían ropa de vestir, luego volvieron a Oruro, donde los hermanos mayores comenzamos a confeccionar pantalones jeans Coné, Wrangler, U-Stop, imitando marcas, puesto que la conducta del consumidor boliviano prefería marcas extranjeras, pues asumían que eran de mejor calidad”, recuerda Alfonso Magne, el hermano mayor, actual Presidente del Grupo TRAILER y propietario del primer módulo de confección de jeans.